La veleta está instalada en la Ermita de San Antonio de Padua justo al lado del Parque de San Antonio.
Su origen data del ultimo tercio del siglo XVIII.
Está formado por una sola nave con cinco tramos articulados con pilastras adosadas cajeadas y cubierta de bóvedas vaídas. El retablo original el siglo XVIII fue sustituido por uno moderno, que contiene la imagen del titular de San Antonio de Padua, para sustituir a la destruida en 1936.
Posee en su ermita una imagen de Cristo Resucitado, talla en madera de cedro policromada, obra del imaginero José Coronado Cabrera de Morón de la Frontera (discípulo de Antonio Joaquín Dubé de Luque)
Además en su capilla existen las imágenes de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, Virgen del Carmen, Santa Ángela de la Cruz y Santísimo Cristo del Perdón.
Agradezco a los amigos que dejaron su comentario:
-Luna, Adara, Towanda.
...Y los ganadores:
-Cepero (¡gracias por tu adivinanza!),Er pena de Arahal (felicidades por formar parte de esta entrada ya que no debía de faltar un paduano por aquí) y manuel ( "nunca es tarde si la dicha es buena")
Mañana Jueves más.
La tradición se mantiene año tras año. Todos los martes de todo el año, los devotos de San Antonio,visitan su ermita y van a rezarle.
2 comentarios:
No soy especialmente religiosa, no sigo la vida de las Hermandades ni he hecho nunca estación de penitencia. Me gusta la estética de las cofradias, las vísperas de la celebración, pero no soy fervorosa.
Sin embargo, cada 13 de junio, me arreglo temprano y sin esperar a nadie de mi familia, me voy a la puerta de mis padres para ver pasar a San Antonio. Ahora me acompaña mi hija que no entiende como no me pierdo su salida ni un año. Me gusta verlo venir por mi antigua barriada, pequeño, casi inseguro, con pocos hermanos alrededor (aunque cada año son más). Sencillo. No sé si tiene que ver con mis recuerdos, con mis angustias de adolescentes o con la creencia inculcada por mi madre de que San Antonio Bendito me escuchaba. Antes iba cada martes a verlo, sentarme en la Ermita me daba paz. Ahora no lo hago, no vivo cerca y los martes pasan con mil tareas a la esplada. Pero cada año, el 13 de junio, me arreglo y voy en su búsqueda. Faltar es como un sacrilegio.
Yo, creo que acerté también, porque dije en una iglesia....
Fali, ¡por favor!, repasa y dame el premio de consolación, jajajaja.
Un abrazo.
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